Irán se abre paulatinamente al turismo

EXPRESO - 09.04.2014

Irán es un país sin los restaurantes de comida rápida ni grandes cadenas hoteleras internacionales

Iran_bazar_TabrizIrán es un país sin los restaurantes de comida rápida ni grandes cadenas hoteleras internacionales. Cuenta con un espectacular patrimonio cultural y arquitectónico, una exquisita gastronomía, magníficos parajes naturales, así como un pueblo agradable y muy hospitalario. Pero apenas recibe a cuatro millones de turistas por año, una cifra realmente escasa que el gobierno de Hasan Rohani está tratando de incrementar.

La impresionante plaza y mezquita de Isfahan, el laberíntico bazar de Tabriz, los templos de Zoroastro TAJT y Soleiman, la encantadora ciudad desierta de Yazd, la estación de esquí de Alborz o las impresionantes ruinas de Persépolis son, hoy en día, unos focos de atracción muy importantes para el turismo.
En Irán, un viajero puede tomar fotos sin que aparezcan en ellas docenes de personas que llevan mochilas, sombreros y gafas de sol frente a ellos.
Un viajero puede comer platos verdaderamente locales o pasear tranquilamente sin ser abordado en las calles, donde casi todo el mundo sonríen y dicen: ‘Hola’.
En el pasado 2013, hubo 4,6 millones de entradas registradas en los diez primeros meses del año, tal y como ha confirmado el subdirector de la Organización para la Cultura, Artesanal, y el Patrimonio Turístico de Irán, Morteza Rahmani Mohaved, quien aclaró que la estadística incluye todas las entradas de extranjeros.
Los turistas, afirmó, vienen a ser un 65% de esa cifra y, de ellos, alrededor de la mitad provienen de la vecina Irak y llegan para ir al médico o para visitar el santuario de Imam Reza en Mashad, un lugar sagrado para los chiítas.
Rohani quiere cambiar esta situación y apuesta por el turismo, no sólo por su contribución a la recuperación económica de este país, sino que ‘el turismo puede ayudar a crear relaciones y posibilita la interacción entre las naciones y acercar la proximidad cultural y el entendimiento mutuo’.
Teherán está tratando de proporcionar un visado a los nacionales de todo el mundo a excepción de diez países, entre los que se incluirán el Reino Unido y los Estados Unidos.
El sistema todavía no está al 100% y un viajero sin visado puede ser expulsado del aeropuerto de llegada sin mucha explicación en cuanto a su rechazo.
La OMT, Organización de Turismo Mundial, ha confirmado que en el último medio año 'es más fácil' viajar a Irán.
‘Poner más atención al desarrollo del turismo es una de las principales políticas de este gobierno’, afirma Rahmani.
Sus actuales mercados principales son ‘China, los países de Asia occidental y los estados vecinos’.
La República Islámica de Irán se ha fijado un objetivo, alcanzar los 20 millones de turistas en el horizonte 2025.
Expreso. Redacción. A.F

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