La Casa Real portuguesa recomienda oficialmente Pousadas de Portugal

EXPRESO - 15.07.2014

Portugal_PousadasCon un protocolo firmado el viernes 11 de julio en presencia de SAR, Dom Duarte Pío, duque de Bragança, jefe de la Casa Real portuguesa, y Dionisio Pestana, presidente del Grupo Pestana, Pousadas de Portugal deberán utilizar el sello que representa las armas de la corona portuguesa, como símbolo de este patrocinio.  

Dom Duarte, Duque de Bragança, es el actual heredero de la monarquía portuguesa que se remonta a 1143 con D. Afonso Henriques, ‘O Conquistador’ y fue abolida en el año 1910.
Es reconocido como tal tanto por la República Portuguesa, cuyo Gobierno suele contar con él en cenas y actos oficiales, como por todas las Casas Reales europeas. 
A diferencia de otras casas reales, especialmente la inglesa que tiene más de 800 Royal Warrant Holders de todo tipo de productos o la española que también tuvo proveedores reales hasta la llegada de Juan Carlos I, esta es la primera vez que la Casa Real de Portugal hace un nombramiento de este tipo y la excepción se debe a los fuertes vínculos que la monarquía portuguesa tuvo con muchas de las actuales Pousadas, antiguos palacios y castillos que pertenecieron a distintos miembros de la nobleza y la monarquía portuguesa.
Integrada en el Grupo Pestana desde 2003, año en el que el mayor grupo hotelero portugués ganó el premio de estas unidades, las Pousadas de Portugal, similar a los Paradores de España, son ahora una prestigiosa marca mundial. Historias que ofrecen experiencias de ensueño y una cocina propia, donde las recetas tradicionales siguen siendo el ingrediente principal. Son lo mejor que hay en cada región. Monumentos nacionales hoy convertidos en unidades de hotel de excelencia, que apelan a los cinco sentidos e invitan a tomar un descanso.  
‘Este certificado de calidad otorgado por la Casa Real portuguesa es muy importante para nosotros. No sólo es el reconocimiento público de lo que guardamos como un beneficio, sino que significa que, a lo largo de los años, hemos sabido conservar la historia y las historias que aquí permanecen. Pousadas de Portugal son un patrimonio que pertenece a todos los portugueses y nosotros hemos tratado de mantener lo más fiel posible como patrimonio colectivo. Lo hacemos de la mejor manera que sabemos, ofreciendo unidades de hotel de excelencia con servicios de calidad, que proponen experiencias únicas y exclusivas, en un sector cada día más competitivo’, destacó Dionisio Pestana, presidente del Grupo Pestana.
Historia y sabor 
Viajar a principios del siglo XX y revivir el verano del rey D. Carlos en la Pousada de Cascais, que una vez fue la casa de vacaciones de la familia real portuguesa. O si se prefiere, sentirse como una princesa en la pequeña y pintoresca Pousada de Obidos, refugio de la reina Santa Isabel, Felipa de Lancaster, y muchas otras reinas que custodiaban el castillo para si, ofrecido por el rey como dote.
Para los más aventureros, qué decir de los muros de la Pousada de Setúbal que sirvió a D. Pedro como fuerte contra los ataques de piratas y corsarios? Y para los más románticos por qué no casarse en la Pousada de Alcácer como hizo D. Manuel I con su segunda esposa María de Castilla? Historias de nuestra historia, que abren sus puertas para recibir a portugueses y extranjeros.  
Las Pousadas ofrecen también la posibilidad de conocer Portugal, desde los verdes y bucólicos valles del Miño, pasando por lugares donde la naturaleza se manifiesta en todo su esplendor, como el valle del Duero, y las exuberantes montañas de Trás-os-Montes, hasta las llanuras doradas del Alentejo o la arena fina y las aguas cálidas de la costa del Algarve.
Para un pueblo con un pasado histórico tan rico como el luso, los aspectos gastronómicos tienen un marcado componente tradicional que es preciso conservar y promover. Dada la diversidad de su herencia secular, las Pousadas de Portugal constituyen la mayor red de restaurantes regionales del país, distinguiéndose por su rica y variada oferta gastronómica, que revela secretos de un arte milenario y recrea lo mejor de la cocina regional, siempre acompañada de los vinos portugueses más genuinos. 
Lugares para la contemplación y el descubrimiento en que, bajo un claustro manuelino, en medio de la serenidad de un paisaje o ante una majestuosa montaña como horizonte, se encontrará siempre la mejor compañía para disfrutar del buen comer. Lugares donde se ofrecen auténticos manjares.
Templos de la gastronomía regional portuguesa, que se conservan y transmiten de generación en generación. 
Hace apenas unas semanas se inauguró la última de las pousadas históricas, se trata de la Pousada da Serra da Estrela. En un edificio construido a principios del siglo XX como hospital para los trabajadores de los ferrocarriles nacionales, a fin de que se beneficiaran de un ambiente tranquilo y de los aires de la sierra.
Como parte de un proyecto dirigido por el arquitecto Eduardo Souto Moura, esta pousada se incorpora también a un nuevo concepto de establecimientos, de mayores dimensiones, ya que cuenta con 95 habitaciones. El siguiente proyecto, cuya inauguración está prevista en 2015, es la Pousada do Terreiro do Paço, junto a la Praça do Comércio, el lugar más emblemático en el centro de Lisboa.  
Expreso. Redacción. A.R

Comentarios