La Gomera refuerza su oferta turística slow y de naturaleza

EXPRESO - 06.02.2013

La_Gomera La isla de La Gomera, en el Archipiélago canario, ha dado a conocer en un acto celebrado en el Círculo de Bellas Artes de Madrid, su propuesta como destino de turismo SLOW, en el que el contacto con la naturaleza y un estilo de vida sencillo son pasaporte seguro hacia la felicidad.

De esta vinculación entre la naturaleza, la vida sencilla y la conservación de una cultura y tradiciones auténticas hablaron los ponentes de la Charla- Coloquio, en la que participaron el presidente del Instituto de la Felicidad de Coca Cola, Carlos Chaguaceda; el periodista y escritor, Juan Cruz; y los blogueros Paco Nadal y Carla Royo Villanova.

Durante el evento, emitido en directo a través de internet (y que fue seguido por más de 2.000 internautas), se repasó cada detalle que hace que La Gomera sea un lugar excepcional para desconectar, dedicarse tiempo para disfrutar de la vida y, en definitiva, ser feliz.

Cerca de un centenar de personas compartieron con los ponentes experiencias, anécdotas, ilusiones y recuerdos vinculados a La Gomera y su especial magnetismo, concluyendo que, aunque la felicidad nace de dentro hacia fuera, en La Gomera es imposible no sentirse feliz.

¿Qué es el turismo SLOW?

Todo lo que conforma La Gomera la convierten en un destino donde poder conectar de forma muy directa e intensa con la naturaleza. Además, el visitante se contagia de manera espontánea de un estilo de vida slow, donde el tiempo adquiere la dimensión que le corresponde, al servicio de nuestro bienestar y felicidad.

El consejero de Turismo del Cabildo de La Gomera, Fernando Méndez, resaltó durante la presentación de la Charla-Coloquio que La Gomera es la isla de la felicidad ‘porque no hay prisas, no hay aglomeraciones, la vida transcurre de una manera más armónica en contacto con la naturaleza, y su belleza paisajística te atrapa y realmente influye en el estado de ánimo de forma positiva’.

¿Por qué La Gomera?

La Gomera aspira a convertirse en un destino internacional de turismo Slow, y tiene todos los ingredientes para que así sea: naturaleza, historia, gastronomía y un clima suave durante todo el año.

Es destacable que La Gomera es la isla que cuenta con más cantidad de reconocimientos por parte de la Unesco. Por un lado, el Parque Nacional de Garajonay es Patrimonio de la Humanidad desde 1986 y es un referente en la conservación de la laurisilva. Además, hay otros 16 espacios naturales protegidos que en total ocupan una superficie global de 12.450 hectáreas, lo que representa una tercera parte del territorio insular.

Por otro lado, la UNESCO ha certificado recientemente a La Gomera como Reserva Mundial de la Biosfera por su compromiso con la conservación medioambiental. Se trata de un reconocimiento internacional no solo a un territorio sino a un estilo de vida capaz de cautivar a todo viajero que busque una experiencia especial, única y auténtica.

Por último, en 2009 la UNESCO consideró el silbo gomero Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. El Silbo gomero es un lenguaje silbado que se utiliza desde tiempo inmemorial para comunicarse a grandes distancias. No se trata de una serie de códigos preestablecidos que sirven para expresar contenidos limitados, sino de un lenguaje articulado, reductor, no convencional que permite intercambiar una gama ilimitada de mensajes al reproducir mediante silbidos las características sonoras de una lengua hablada.

Gastronomía gomera

Durante el acto celebrado en el Círculo de Bellas Artes de Madrid se presentaron algunas muestras de la rica (y desconocida) gastronomía gomera. La gastronomía isleña guarda en sí la esencia de sus pobladores.

El queso, el almogrote, los mojos, los dulces, el gofio, el vino o la miel de palma son productos típicos capaces de deleitar a todos los paladares. Todos estos productos de carácter tradicional, cuyo origen se pierde en el tiempo, a día de hoy son producidos en La Gomera por pequeñas empresas que están ayudando a mantener el paisaje agrícola y todo un acerbo cultural original y propio. Platos típicos como el potaje de berros, servido en platos de madera de sabina o aceviño, son una curiosidad culinaria única.

Además, La Gomera cuenta, desde 2003, con vinos Denominación de Origen, ‘Vinos de La Gomera’. Los vinos más característicos de la Isla son los blancos, de color amarillo paja con intensos aromas varietales, agradables en boca, con cuerpo y un bouquet especiales. Los vinos tintos, de bonito color rubí y aromas afrutados, son suaves y equilibrados.

Expreso. Redacción. T.A

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