Cuixmala, en México, bienvenido al paraíso

Algo parecido debió pensar Sir James Goldsmith cuando decidió adquirir las 25.000 hectáreas de esta rica tierra mejicana y construir Cuixmala, que dicen es lo más parecido al Paraíso en belleza de paisajes, en lujo arquitectónico, en despliegue de medios naturales y de servicios, en opulencia, grandiosidad y sencillez equilibradas en pos de la belleza y la paz que se respira de norte a sur y de este a oeste.

Cuixmala es una extensa propiedad privada en el estado de Jalisco y está rodeada de vegetación tropical, protegida por la Fundación Ecológica Cuixmala. Tiene 4 villas impresionantes (Casa La Loma, Casa Alborada, Casa Puma y Casa Torre) y numerosas casitas con mucho colorido que contrastan con los alrededores naturales.

Casa La Loma es una espectacular casa-museo, situada sobre un cerro mirando el océano pacífico que combina el estilo mejicano, el mediterráneo y el morisco con 4 lujosas suites y 7 amplios bungalows con terraza, comedor, biblioteca, salón, patios y 3 terrazas cubiertas.

Dispone de una piscina a pie de playa que es un auténtico oasis de paz y serenidad. Casa Alborada es una casa de estilo morisco situada también en lo alto de un cerro con 3 habitaciones que disponen de todas las comodidades y servicios que se requieran.

Casa Puma está rodeada de un lujoso jardín exótico con vistas al palmeral y al océano y se caracteriza por la paz y tranquilidad que su estructura arquitectónica transmite.

Casa Torre consta de 2 master suites más otras dos habitaciones todas ellas completamente equipadas y goza de unas increíbles vistas y de una piscina que acaba donde empieza el infinito.

Las puestas de sol son una maravilla desde aquí. Disfrutar de la vegetación y la fauna, pero también de la playa. La fundación ecológica de Cuixmala forma parte de un grupo de ecosistemas que preserva las especies endémicas y protege la vegetación tropical, favoreciendo la riqueza de frutas (papaya y el mango) y también el cuidado de la fauna autóctona (pumas, cebras, ocelotes y garzas azules) y la vida marina (ballenas y delfines)

Pero Cuixmala lo tiene todo y por supuesto tiene playas. Con la costa del Pacífico a sus pies, el viajero puede disfrutar de 3 playas privadas, vírgenes y muy distintas para relajarse. Por supuesto, las actividades que se pueden realizar en esta reserva son infinitas.

Para acceder a Cuixmala se puede volar directamente a Ciudad de México y desde allí existen conexiones a Manzanillo, Colima o Puerto Vallarta y el hotel ofrece servicio de recogida en el aeropuerto.

Y para los que quieran completar el viaje con otra vivencia de ensueño, a pocos kilómetros de Cuixmala y a 40 minutos de Colima se encuentra la Hacienda San Antonio, construida en 1879 y propiedad también de Sir James Goldsmith, con 202 hectáreas de un antiguo cafetal y ubicada al pie de un hermoso volcán activo.

Hacienda de San Antonio está construida mayormente por piedra volcánica y cuenta con 25 inmensas suites, decoradas con auténticas obras de arte que harán sentir al huésped como un auténtico lord.

La cocina es internacional o mejicana según se desee, y se prepara con frutas, verduras, queso y café elaborados orgánicamente en la Hacienda.

La oferta de actividades es tan variada como personal: desde un paso por la playa a  caballo, a una vuelta en barca por las lagunas de cocodrilos o un almuerzo campestre de lo más sibarita.