Brasil, entre los 10 mejores destinos para viajar en solitario

El país sudamericano ocupa el noveno puesto en una encuesta realizada por el ‘US News & World Report’, a más de 17.000 personas de todo el mundo.

Para desconectar de verdad, depender de nosotros mismos y concentrarnos por completo en lo que estamos viviendo en ese momento. Todo aquel que lo ha experimentado reconoce que viajar solo es una experiencia única. 

A la hora de emprender un viaje por nuestra cuenta debemos tener muy en cuenta el destino que escogemos, aunque una de las ventajas de viajar sin compañía es que no tendrás que pelearte con nadie sobre qué país visitar.

Así, Brasil es sin duda uno de los mejores países que recorrer en solitario. El US News & World Report ubica a Brasil en el 9º puesto de países preferidos por los viajeros que emprenden su aventura en solitario -según una encuesta realizada a más de 17.000 personas en todo el mundo.

El país tropical es el primer destino iberoamericano de la lista, encabezada por España, Italia y Grecia. 

Brasil es uno de los países preferidos por las personas que se lanzan a viajar solas, aumentando la cifra todos los años. En 2019, el año previo a la pandemia, 34.800 viajeros llegaban a Brasil para recorrer el país en solitario, según datos de la Encuesta de Demanda Turística Internacional elaborada por el Ministerio de Turismo de Brasil. 

El país cuenta con características y actividades para todos los gustos. El territorio brasileño es único en el mundo, ya que cuenta con seis biomas (Amazonia, Caatinga, Cerrado, Mata Atlántica, Pampa y Pantanal), además de la Amazonia Azul, enormes parques naturales, playas paradisiacas y una gran diversidad cultural. Sin duda, un país que ofrece mil oportunidades y experiencias distintas. 

Si estás pensando en hacer tu próximo viaje con la única compañía de tu mochila y un buen libro, a continuación, podrás descubrir tres destinos que representan de manera excepcional la riqueza de Brasil: 

Brotas 

Brotas es un municipio del estado de São Paulo y muy popular entre los amantes del rafting.  El turismo de aventura tomó fuerza en los años noventa, con los descensos por los rápidos del río Jacaré Pepira y más adelante, el rafting.

El Río Jacaré Pepira es uno de los pocos ríos que aún permanecen sin ningún nivel de contaminación, gracias a conciencia de la población local, que respeta al máximo su naturaleza y son los principales cuidadores del ecoturismo brasileño. 

En Brotas podrás practicar barranquismo en sus cascadas; realizar rutas de arborismo; o incluso lanzarte en tirolina si te gustan las emociones fuertes. Además, si viajamos solos, este tipo de actividades son la excusa perfecta para socializar y conocer gente nueva que, si fuésemos en grupo, quizás no nos molestaríamos en conocer. 

Para llegar a la ciudad, lo mejor es hacerlo a través del aeropuerto de Viracopos, en la ciudad de Campinas, ya que es el más cercano a la región, situada a 165km. Si no, también puede llegarse a través del aeropuerto de Congonhas, a 250km; o del de Guarulhos, a 270km.

Chapada dos Veadeiros 

Chapada dos Veadeiros se encuentra en el estado de Goiás y está a unos 220 km al norte de la ciudad de Brasilia. Los principales atractivos de la región se reparten entre los municipios de Alto Paraíso de Goiás, Cavalcante y la pequeña aldea de São Jorge - donde se encuentra la entrada al Parque Nacional de Chapada dos Veadeiros. 

La zona destaca por su parque nacional y su sorprendente fauna, flora y formaciones geológicas. El parque nacional de Chapada dos Veadeiros tiene una extensión de 65.515 hectáreas que representan el lugar perfecto para perdernos y alejarnos del bullicio de las grandes ciudades. 

De hecho, en lo que refiere al alojamiento, lo común es hospedarse en la aldea de São Jorge, justo en frente de la entrada al parque y que carece de carreteras asfaltadas o iluminación pública para cohesionarse con la fauna y flora del parque.

Sin duda, una experiencia única para aquellos que deciden perderse -o encontrarse, según se mire- en Chapadas dos Veadeiros.  Otra opción para alojarnos es Alto Paraíso, una pequeña ciudad que se encuentra a unos 20 km de la entrada del parque nacional y que se asemeja más a las ciudades modernas que conocemos hoy en día. 

Más allá del parque nacional, la región cuenta con otras atracciones dentro de propiedades privadas, como el Valle de la Luna y las cascadas de Almécegas, situadas cerca de São Jorge, a las que se puede acceder mediante el pago de una cuota diaria. 

Además, la región de Chapada es conocida por las propiedades de su suelo cristalino y visitada por muchos curiosos debido a las supuestas apariciones de ovnis acontecidas en la región. 

La mejor forma de llegar hasta Chapada es coger un avión hasta Brasilia y desde allí, seguir el viaje en coche o autobús. 

Jericoacoara 

Jericoacoara es un pequeño pueblo de pescadores, meca del windsurf y el kitesurf, situado en Ceará, Brasil. Se encuentra a unos 300 km al oeste de Fortaleza. 

Conocido como Jeri, es el típico lugar de ensueño en el que los viajeros acaban quedándose más tiempo del que tenían previsto -algo que es mucho más sencillo de hacer cuando no viajas con nadie más y puedes hacer y deshacer tu ruta a placer. 

Con sus mares tranquilos, Jericoacoara es el lugar perfecto para practicar deportes acuáticos y y disfrutar de una increíble belleza natural. 

Jijoca de Jericoacoara se encuentra en el extremo oeste del estado de Ceará, a unos 300 km de la capital, Fortaleza. El municipio alberga la famosa playa de Jericoacoara, considerada una de las más bellas del mundo. 

Las aguas de Jeri son poco profundas y hay muy pocas olas, lo que supone unas condiciones ideales para practicar deportes acuáticos como el Stand Up Paddling, el Kitesurf y la vela. Además, cuenta con muchas balsas locales por toda la playa, que está rodeada de pequeños estanques y dunas de 30 metros de altura que cambian de color a lo largo del día, según la incidencia de la luz solar. 

En el lado izquierdo de la playa, se encuentra la "Duna del Atardecer". Todas las tardes, hacia las 17:00, no hay nada mejor que subir a la cima de la duna y contemplar la espectacular puesta de sol. Siempre atrae a multitudes, que aplauden con entusiasmo mientras el sol se pone en el mar. 

Jericoacoara es un verdadero paraíso natural en la tierra. No hay postes de luz en las calles, por lo que la luna y las estrellas son la única luz por la noche, lo que aumenta el encanto local. Tampoco hay calles pavimentadas.

Lo cierto es que no hay palabras para describir Jericoacoara. Es de esos lugares que tienes que visitar para comprender que su encanto va más allá de lo que hayas podido leer sobre el lugar previamente. 

Para llegar a Jeri podemos hacerlo a través de sus dos aeropuertos, el de Fortaleza (FOR); o directamente al Aeropuerto de Jericoacoara (JJD).

Expreso. Redacción. T.R