El hotel La Escondida abre en Penáguila, Alicante

EXPRESO - 09.10.2014

Tras año y medio de profunda renovación, el 6 de octubre de 2014 ha abierto sus puertas el  Hotel La Escondida

Hotel_La_EscondidaTras año y medio de profunda renovación, el 6 de octubre de 2014 ha abierto sus puertas el  Hotel La Escondida. Rodeado de 200 hectáreas de olivos y bosques de almendros en pleno  parque nacional, combina impresionantes vistas con un interiorismo refinado y 'una  gastronomía sencilla y deliciosa'. 

Propiedad del ex entrenador del Barcelona Terry Venables, se encuentra en Penáguila, a unos 30 minutos de Alicante y de las playas y calas secretas que esconde el litoral de la Costa  Blanca.
Sus alrededores, con el Parque Nacional de la Font Roja a pocos pasos, 'son  paisaje protegido, y proporcionan vistas ininterrumpidas difíciles de igualar', segun apuntan desde el hotel.
Según cuentan sus dueños, ‘los únicos sonidos que oirán tras una noche de sueño reparador serán las campanas y cencerros de los rebaños de cabras en la distancia’. El matrimonio Venables se enamoró de España durante la estancia de Terry en el banquillo culé en la década de los 80, y hace 15 años, en una de sus reiteradas visitas a los pueblos de la Costa Blanca, un vecino de la zona les convenció para visitar La Escondida, a 600  metros sobre las colinas.
‘La zona tenía una belleza impresionante’, recuerdan. ‘Siempre hemos buscado lugares fuera de los trayectos habituales, y la Escondida lo estaba, a pesar de su cercanía con la costa’.
Terry e Yvette adquirieron el edificio principal y desde  entonces han ido comprando tierras a su alrededor. Durante la renovación de sus edificios se han esforzado por preservar cuidadosamente el encanto y la historia genuinos de la propiedad, creando un alojamiento donde el verdadero lujo se esconde en los detalles. Han conservado elementos originales: desde los  azulejos pintados a mano hasta las vigas de roble, pasando incluso por los objetos, piezas  de maquinaria y aperos de labranza. Su casa principal data de 1881, y fue  construida como pabellón de caza.
Hoy cuenta con diez habitaciones de elegante diseño, a las que se suman dos suites de madera al borde del pinar y a sólo dos minutos a pie. Todas ellas están decoradas individualmente en estilo rústico contemporáneo y sus interiores ofrecen muebles artesanales a medida fabricados en exclusiva para la propiedad y tejidos con motivos vegetales y animales, integrados entre sus paredes de piedra y sus espectaculares vigas de madera. 
La Escondida cuenta también con el encanto de su Torre Sena, romántica casa del siglo  XIII con su propia capilla a cinco minutos a pie de la casa principal, que abrirá sus  puertas en el 2.015. Una parte fundamental de la experiencia del Hotel La Escondida es su gastronomía.
‘Durante nuestras vidas hemos tenido la oportunidad de probar una comida increíble’,  explica Terry, ‘y la mejor es siempre muy sencilla y bien presentada, cocinada con los  ingredientes más frescos’.
Su chef, formado por un cocinero con estrella Michelín, 'prepara platos sencillos y deliciosos, con frutas cosechadas a mano y verduras de la  propia huerta acompañadas por pan recién hecho en la cocina del hotel'.
El hotel dispone, además, de dos piscinas: una cubierta climatizada que se abre a la  naturaleza en los meses más cálidos, y una piscina exterior rodeada de  jardines, sin olvidar sus dos salas de tratamientos de Spa, con terapeutas cualificados y una gran oferta de masajes, peelings y exfoliaciones corporales, además  de manicura y pedicura.
En cuanto a la oferta de actividades, la zona es muy rica en alternativas: jogging, caballos, picnic, rutas de senderismo y bicicleta de montaña.
Expreso. Redacción. T.R

Comentarios

internauta (no verificado)

A 30 minutos del mar en helicóptero. En coche 1 hora y con carreteras horribles. La crónica parece un cuento de hadas, como se puede mentir tanto hahaha