El aeropuerto de Barajas galardonado por su diseño arquitectónico

EXPRESO - 13.12.2011

La revista National Geographic Traveler ha elegido al aeropuerto madrileño de Barajas como ‘el aeropuerto con mejor diseño arquitectónico del mundo’ y lo ha hecho en su último número, en el que selecciona las instalaciones internacionales más destacadas, que, en conjunto, constituirían el denominado ‘el aeropuerto perfecto’.

El administrador aeroportuario español, Aena, ha señalado que el aeropuerto de Barajas encabeza la lista gracias a ‘su novedosa arquitectura’ y la publicación destaca la gran bóveda ‘empapada de luz natural’ que fuera diseñada por los arquitectos Richard Rogers y Antonio Lamela y ‘las vigas de colores, sobre las que se apoya el techo laminado de bambú, que ayudan a orientarse a los pasajeros’.

La T4, inaugurada en el año 2006, ha sido galardonada con numerosos premios, entre los que destaca el RIBA Stirling 2006, ororgado por el prestigioso Royal Institute of British Architects.

Para Aena, en su búsqueda del aeropuerto perfecto, National Geographic Traveler también resalta el aeropuerto de Changi, en Singapur, que califica como ‘el mejor para pasar el día’; el holandés de Amsterdam-Schiphol, por su colección de arte y sus exposiciones temporales, y el estadounidense de Dallas/Fort Worth, por sus áreas de juegos infantiles que recrean ‘mini aeropuertos’.

Expreso. Redacción. T.R

Comentarios

internauta (no verificado)

14.12.2011 - 16:45

Quiero manifestar mi adhesión tanto al reconocimiento de mejor diseño como a la opinión de que la T-4 está entre los pocos que se aproximan al 'aeropuerto perfecto'.
Es obvio que lo del diseño, por subjetivo, es todo lo discutible que queramos, pero no creo que su aspecto práctico sea objeto de controversia.
Su organización es sencilla y la señalización perfecta, tanto en su actividad interna como en sus intercambios con la 'satélite' y las otras terminales.
Su sistema de información puntual y concreto.
Las opciones de comercio, ocio y restauración, para los tiempos muertos que nuestras necesidades de conexión nos condicionen, son variadas y amenas. Hay que reconocer, no obstante, que la restauración resulta, en general, muy cara.
Con todo ello creo que su mejor cualidad es la óptima comunicación, tanto por su enlace con el Metro, que nos introduce en la ciudad y en toda la red ferroviaria en un santiamén, como por el magnífico entramado de autovías.
Estoy convencido de que este reconocimiento al buen aeropuerto es extensible a las comunicaciones de Madrid en todas sus alternativas.