Un día en Jerez de la Frontera, abriendo boca con los tópicos

EXPRESO - 04.05.2013

Texto y fotos: Manolo Bustabad Rapa y Pilar Alonso Canto Jerez es el mayor núcleo urbano de la provincia de Cádiz, a sólo 14 kilómetros del Puerto de Santa María y a 35 de la capital

Texto y fotos: Manolo Bustabad Rapa y Pilar Alonso Canto

Jerez es el mayor núcleo urbano de la provincia de Cádiz, a sólo 14 kilómetros del Puerto de Santa María y a 35 de la capital. Sólo tenemos un día para su visita y tratamos de sintetizar yendo a tiro fijo, esta vez siguiendo los tópicos.
caballo
Los caballos, los vinos, algunas iglesias periféricas al centro histórico y una cena relajada en el restaurante La Cruz Blanca. El día no nos da para más, pero es una buena manera de abrir boca, porque a Jerez de la Frontera hay que volver.
Arte de jinetes y caballos
En Jerez es imposible saber cuál es el gran amor: ¿los toros o los caballos? Dos mundos que se cruzan con fuerza y poesía, embelesando a jerezanos y forasteros. Nosotros tuvimos la fortuna de asistir a una exhibición en el picadero cubierto de la Fundación Real Escuela Andaluza del Arte Ecuestre en el tradicional ejercicio espectáculo ‘Cómo Bailan los Caballos Andaluces’.
Como dice el dossier informativo, ‘un auténtico ballet ecuestre con música netamente española y vestuario a la usanza del siglo XVIII,… , jinetes y caballos andaluces se aúnan elevando su comunicación a la categoría de arte’.
bailan
Fundada en 1973, su finalidad es múltiple: formación de jinetes y profesionales del caballo, selección de caballos sementales de pura raza española, conservación y difusión del arte ecuestre, mediante sus museos, sus competiciones deportivas y sus cursos de tecnificación.
La Real Escuela ocupa el Palacio Recreo de las Cadenas, mandado construir por el empresario vinatero francés Julián Pemartín y Laborde, abuelo de José María Pemán, más tarde Palacio de Abrantes, por habre pasado a esta familia, que además dio nombre a la céntrica calle en que se asienta, la Avenida del Duque de Abrantes. En sus instalaciones, equipadas con las más avanzadas tecnologías, cuenta con espacios para toda clase de eventos y celebraciones.
Una breve parada para comer
Muy cerquita de la Real Escuela Andaluza del Arte Ecuestre, escondido en un rincón de la plaza peatonal del Conjunto Residencial sito en la calle Divina Pastora, encontramos un mesón para recomendar: ‘La Solera’.
potaje
Recordamos especialmente los ‘primeros’: una exquisita sopa de arroz con picadillo y un inolvidable potaje de garbanzos con langostinos. La decoración, de ambiente ecuestre y taurino. El precio: alrededor de 15 euros. Para reservas: 956 32 02 51.
Una bodega de vino y pintura
Esta ciudad es universalmente conocida por sus famosos vinos, que ocupan un lugar prominente en su economía, por eso era obligado el paso por una bodega y en esta ocasión elegimos la de Bodegas Tradición, en la calle de los Cordobeses, nº 3, muy cerca de un tramo de muralla árabe que aún se conserva.
El edificio es una muestra de la arquitectura bodeguera del siglo XVIII y es la única bodega de la Denominación de Origen Jerez dedicada exclusivamente a la elaboración de los vinos más viejos, dentro de las categorías que ampara el Consejo Regulador: V. O. S. (1), como el conocido ‘Pedro Ximénez’, de más de 20 años y cuyos orígenes están en solera de Sandeman del Siglo XIX y de Harveys, y V. O. R. S. (2), con vinos como el ‘Amontillado’, el ‘Oloroso’ y el ‘Palo Cortado’, con 37, 39 y 32 años respectivamente, cuyas soleras proceden del siglo XIX y alguna del XVIII.
bodega
pinturas
El brandy de Bodegas Tradición es único por su vejez y complejidad y está avalado por el Consejo Regulador como Solera Gran Reserva en sus dos presentaciones, Gold y Platinum.
Pero lo más peculiar de esta bodega es que en ese casco centenario alberga permanentemente la Colección Joaquín Rivero de pintura, formada por más de 300 lienzos de los mejores pintores españoles de los siglos XV al XX, entre otros, Zurbarán, Velázquez, Goya, De Haes, Jiménez Aranda, Sorolla.
En definitiva, una oportunidad única de degustar algunos de los vinos más viejos de Jerez, disfrutando de esta impresionante muestra pictórica, si se prefiere con visitas guiadas.
Por la calle de la Merced y el barrio de Santiago, de iglesia en iglesia
Al salir de la bodega, volviendo a la parte de la muralla árabe, pronto avistamos el Santuario de Nª Sra. De la Merced, elevado a Basílica Menor por Pio XII en 1949, con su bella fachada del siglo XVII.
merced
En realidad el convento es hoy el Instituto de Segunda Enseñanza Isabel de Hungría, pero tuvo múltiples destinos: fue ocupado por las tropas de Napoleón y con la desamortización pasó a ser Hospital Municipal, hasta 1975. Dos curiosidades: alberga el mausoleo con los restos de Miguel Primo de Rivera y es sede de la Hermandad del Transporte.
Continuando por la misma calle de La Merced, nos adentramos en el barrio de Santiago, ‘crisol de lo payo y lo gitano’, en cuya plaza tienen una bonita fuente romántica que procede del antiguo hospital de Santa Isabel de Hungría. La Iglesia de Santiago, gótica de finales del XV y primera mitad del XVI, con remates barrocos en la torre y espadaña, está en restauración, parece ser que con graves problemas de cimentación.
Siguiendo por extramuros hasta topar con Porvera (nombre de calle bien significativo), nos damos de frente con la Iglesia de la Victoria, que hace esquina a la calle Pozo del Olivar. Perteneció al monasterio de la Virgen de la Victoria, fundado en 1543 por los Padres Mínimos de San Francisco de Paula.
iglesia
En su claustro y dependencias se ubicó la Escuela de Artes Aplicadas y Oficios Artísticos y después la Escuela de Comercio. La torre de la iglesia, de estilo manierista, es del 1639, obra de Antón Martín Calafate.
Aún recorrimos la Calle Larga, hasta la Plaza del Arenal, bordeando el Alcázar camino de la Colegiata de San Salvador, ascendida a Catedral en 1980, sin posibilidad ya de visitarla y con poca luz para fotografiar su ‘campanario exento’, construido en el alminar de la Mezquita Mayor Almohade.
Una cena degustación en el Restaurante La Cruz Blanca
A un tiro de piedra de la Catedral, en c/Consistorio, 16, se encuentra La Cruz Blanca, un restaurante para repetir. No olvidaremos sus ‘tostas de queso con cebolla caramelizada y nueces’, sus exquisitas ‘gambas del Puerto de Santa María’ y su ‘jamón ibérico’.
Todo ello acompañado con Garum 2011, un logrado tinto de la Tierra de Cádiz, que fue un auténtico descubrimiento.
cena
naranjos
Y a dormir en ‘nuestro’ Barceló Montecastillo Golf Resort
En el kilómetro 6 de la carretera de Arcos, próximo al circuito de velocidad, en un increíble marco verde, se encuentra este extraordinario hotel, al que llegamos rendidos después de la maratoniana jornada y al que deseamos volver para saborearlo con más tiempo y disfrutar de sus personalizadas atenciones.
Los aficionados al golf encuentran en el Barceló Montecastillo un servicio green-fee gratis e ilimitado, en un campo de 18 hoyos, diseño de Jack Nicklaus. 
 
Más información:
Turismo de Cádiz: www.cadizturismo.com 
 
catedral
 

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