Sentirse como James Bond en la costa portuguesa de Estoril

EXPRESO - 10.12.2012

Texto y fotos: Federico Ruiz de Andrés
El Hotel Palacio, el English Bar o el Casino de Estoril fueron algunos de los enclaves frecuentados por los espías en el siglo pasado y la fuente de inspiración del agente inglés Ian Flemming para escribir la novela Casino Royal (1952), que creaba la mítica figura de James Bond.
Pero el agente secreto no ha sido el único personaje famoso que ha vivido en esta preciosa costa portuguesa de Estoril, repleta de intrigas, historia y elegancia, que hoy constituye una de las escapadas más atractivas del país.
Varios años antes de que la región fuera elegida residencia de verano de la Familia Real española, Estoril y sus alrededores ya habían organizado episodios importantes de la historia de Portugal, y esta era una zona de defensa del bienestar del puerto de Lisboa. 
Desde finales del s.XVIII, médicos de varios países de Europa abogaron por las ventajas de la terapéutica de los baños de mar. De este modo, la temporada de verano se convirtió en un acontecimiento social y la Riviera portuguesa se transformó en una popular zona turística costera y la residencia de vacaciones de los reyes portugueses. 
Combinando glamour, lujo y tradición, llegaron luego a Estoril los miembros de la alta sociedad europea, como los reyes exiliados, escritores, artistas y banqueros durante la Segunda Guerra Mundial, convirtiéndose también en el principal destino de los espías británicos, japoneses y alemanes.   
En los años treinta, el mítico Surexpreso que salía como punto de partida de la estación Charing Cross de Londres, llegaba a Paris y comenzaba su camino al sur: Hendaya, San Sebastián,… concluyendo aquí su viaje.  
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Estoril es, de hecho, un hito en el turismo europeo. Fue acreditada como una playa real desde el año 1867, un spa desde 1880, un tren a Lisboa desde 1889, un casino desde 1891, y un enlace a París, a través de la Sud-Express desde 1887 y que terminó su curso en Estoril durante algún tiempo. 
El Surexpreso ya no llega hasta Estoril, pero sí hasta Lisboa, y es la forma más elegante de viajar hasta la capital portuguesa. En la misma estación de Santa Apolonia, fin de trayecto, se puede tomar un tranvía hasta Estoril.
Así, con la llegada de este elegante ferrocarril ferrocarril nocturno llegamos a 1930, el mismo año en que tenía lugar la inauguración del Hotel Palácio y pocos meses antes de que la Riviera portuguesa estrenase su famoso Casino.
El que fuera conocido como centro de operaciones de los espías ingleses y alemanes durante la Segunda Guerra Mundial, el Hotel Palácio, dispone ahora de una amplia oferta de atractivos turísticos, pero llegar a sentirnos James Bond es uno de los más destacados.
El personaje de James Bond está basado en el doble agente Dusan Popov, un espía del M16 que era conocido como Iván, para los alemanes; y Tricycle por los ingleses. Flemming lo definió como un hombre atractivo, que le encantaba seducir a las mujeres y adicto al juego, sobre todo al Black Jack. No es de extrañar que algunos de los actores que han hecho de Bond hayan sido Sean Connery o Pierce Brosnan.
Seductor, jugador y de vida disipada este serbio de familia acomodada y formado en París y Alemania, fue un muy buen espía para el MI6 inglés consiguiendo información clave para los aliados en el Día D.
Fleming, que era un agente inglés integrante alto almirantazgo, fue el encargado de vigilarlo de cerca y su paso por Estoril es todavía notable en algunos de los lugares emblemáticos de la villa portuguesa.
Este hotel era frecuentemente conocido como el ‘hotel de los murmullos’, dada la gran cantidad de espías de al servicio de ingleses o alemanes que se concentraban en su terraza a todas horas.
Construido en 1930, el Hotel Palácio se define hoy en día como ‘un sofisticado y lujoso hotel de cinco estrellas con un fantástico spa y maravilloso jardín que combina la solidez y la elegancia de la decoración clásica, con las prestaciones de un hotel moderno’.
El pasado 2011 se incorporó a sus atractivos la Galería Real, un espacio en donde se pueden ver varias imágenes y cartas de los reyes y la nobleza europea hospedados en el hotel. Aquí se destacan los nombres de conocidos artistas, directores de cine, deportistas, jefes de estado y de gobierno.
Desde la propia dirección del hotel nos cuentan que los españoles son ‘los mejores clientes extranjeros del hotel’, una instalación que acoge 140 empleados y 160 habitaciones.
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Su bar interior da la sensación de que en cualquier momento aparecerá James Bond y se pedirá su Dry Martini, bebida que podemos degustar en cualquiera de sus terrazas exteriores. Entre sus instalación dispone de piscina y Wellness Centre.
Algunos de sus huéspedes habituales fueron también el escritor francés Antoine de Saint-Exupéry, -creador del entrañable personaje de El Principito -o la familia real española.
De hecho, tenemos la suerte de entrevistar al portero del Hotel Palácio en Estoril, que es el conserje de hoteles más antiguo de Europa y una de las personas que ha visto pasar a su lado a personajes de la historia como Grace Kelly, o el mismísimo Ian Fleming.
Escapadas imprescindibles por la costa
Una vez en Estoril, aunque es enclave bien dotado de mesas y manteles, no podermos perdernos una breve excursión a uno de los templos de la buena cocina.  Hablamos, en esta ocasión de Peixe na Linha, un buen lugar para cenar ya que es el pescado su principal tarjeta de presentación.
Su nombre recoge el gentilicio con el que se conoce a las personas que allí viven en la costa, los de ‘la linha’. El restaurante dispone de acceso directo a la playa y una buena zona de aparcamiento.
Otra escapada muy apetecible es la cercana Praia de Guincho, una amplia playa expuesta a los vientos y a las olas del oeste que le han convertido en el escenario de las pruebas de los campeonatos de Europa y del mundo del windsurf. Desde ella se disfruta de un magnífico panorama del Cabo da Roca.
En Praia de Guincho hay varios restaurantes en donde poder desgustar pescados y mariscos, pero nosotros ahora nos rendimos ante el Porto Santa Maria.
El restaurante acoge ‘la mayor bodega privada del país’ con más de mil referencias puesto que ha venido reuniendo caldos desde 1947, tal y como nos relata Vicente Themudo de Castro, su director, quien apunta a que la apertura del establecimiento fue realizada por descendientes de gallegos.
Se trata de un restaurante muy conocido, de referencia, que ha recibido en sus estancias a la familia Clinton o al Rey de España y su hermana, y cuenta con una zona interior donde se puede fumar.
Cabo da Roca, el occidente de Europa
Es el punto más occidental del continente europeo. Situado en el extremo de la Sierra de Sintra, es sin duda uno de los lugares más emblemáticos de Portugal, ‘onde a terra se acaba e o mar começa, e onde palpita o espíritu da fé e da aventura que levou as Caravelas de Portugal em busca de novos mundos para o mundo’.
Sus montañas hacen que la costa de Estoril tenga un microclima, y este Cabo da Roca se encuentra entre los cerca de 800 puntos geográficos extendidos por el mundo que, desde 1989 están dedicados a la Paz, a través del programa Sri Chinmoy Peace Biossoms.
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A pocos metros, en el Restaurante Refugio da Roca  tienen un rodaballo espectacular.
Garret, la pastelería de los espías
Regresamos al centro de Estoril y justo enfrente del Hotel Palácio localizamos a Garrett, conocida como ‘la pastelería de los espías’. 
Se trata del típico salón de té inglés que también era frecuentado por los agentes de los servicios de inteligencia ingleses y alemanes y que el año pasado celebró su 75 aniversario.
Sus paredes escucharon, sin duda, los secretos de los espías que por aquí se pasaban a endulzar sus existencias. Popov y Fleming se deleitaron con esta confitería que parece sacada de un cuento inglés, con una atención exquisita.
La especialidad son el Bolo Rainha y el BoloRei, un pastel que las gentes de Estoril encargan por Navidad pero cuyo consumo se ha extendido a buena parte del año.
English Bar – Restaurante Cimas: el núcleo de los espías ingleses
Inaugurado en 1941 por el inglés Horace Bass, su barra estuvo atestada de espías durante la parte final de la segunda guerra mundial. En 1952 fue comprado por Francisco Cima Barreiro y transformado en restaurante Cimas. La familia Real Española, Don Juan de Borbón, Conde de Barcelona, era uno de sus incodicionales, cenando en él frecuentemente y reuniendo a figuras de la oposición al régimen del general Franco. 
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Por el Cimas pasaron grandes celebridades lusas, como Marcello Caetano o Francisco Sá Carneiro, quien pasaba allí muchas tardes, trabajando en una de las mesas. También Mário Soares, Carlos Andrés Perez, Willy Brandt o Edén Pastora, el ‘Comandante Cero’.
Torrente Ballester y Jorge Amado han disfrutado también en este Restaurante Cimas, uno de los más famosos de todo Portugal, con su comedor de fantásticas vistas al mar, perfecto para una cena romántica.
Se va haciendo tarde. Es hora, o bien de recogerse, o bien de buscar emociones fuertes. Y para encontrar éstas, sin duda, hay que protagonizar una escapada al Casino de Estoril, un edificio que también entronca con la primera novela y película del agente 007, ‘Casino Royal’.
Se trata del casino más grande de Europa y el complejo de juego y ocio más importante de Portugal. Un atractivo que abre desde la tarde a la madrugada todos los días del año menos en Nochebuena, y que cuenta entre sus muros con la nada despreciable cifra de 679 máquinas tragaperras. Por cierto, también cuenta con zonas separadas para fumar y no fumar.
 
El Casino ha servido como localización para el rodaje de ‘007: al servicio de su majestad’, en la que el mismo agente Dusan Popov jugaba al Black Jack. Su impresionante teatro acoge grandes números musicales o de cabaret, y es un lugar imprescindible en esta escapada secreta por la costa de Estoril.
 
Más información: Turismo de Estoril
 

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